viernes, 12 de diciembre de 2008

COMPETENCIAS INVESTIGATIVAS

DESARROLLAR COMPETENCIAS METODOLOGICAS DE INVESTIGACION O COMPETENCIAS INVESTIGATIVAS

PRIMERA PARTE



La capacidad de la mente humana para
formular y resolver problemas
complejos, como son los de la enseñanza
no ha sido del todo aprovechada.."


Generalmente en la formacion de jóvenes investigadores, las universidades asumen en sus currículos unos cursos de investigación con profesores de investigación que "dictan la asigantura de metodología de investigación". Este procedimiento instrumental, está asimilado y empoderado en todas las universidades del país y con ello se cree que se está formado investigadores con competencias investigativas.

Le agregan a la literatura de los cursos de metodología de investigación, la experiencias de llevar a los estudiantes a conformar Semilleros de Investigación. Con este segundo procedimiento instrumental se logra tapar el hueco de la formación de investigadores y se hacen discursos de los avances en investigación que tiene la universidad y de cómo los maestros y los educandos están involucrados en procesos investigativos, grupos y semilleros produciendo conocimiento nuevo.

Hasta aqui, todo al parecer va bien. Pero pregunte a los estudiantes si en realidad de verdad, estos procedimientos instrumentales los forma como investigadores y les ayuda a desarrollar las comptencias investigativas. ¡La verdad NO!.

Los estudiantes en las aulas dicen lo contrario respecto a lo que hace la universidad, los metodólogos de investigación y los centros de investigaciones. La mayoria manifiestan que las asiganturas, materias-nunca dicen créditos- de metodología de investigación son "un ladrillo". Si los profesores de investigación hacen un ejercicio de investigación-como el que están acostumbrados a realizar- se darán cuenta que el concepto "ladrillo" desafortunadamente lo tienen todos los estudiantes de todas las facultades de todas las universidades.

El doctores Ricardo Gomez Ossa, integrantes del Grupo de Investigación en Cultura de la Investigación.ACEMRIS. Programa de Medicina. UTP. hizo un estudio y encontró los siguientes datos:

Preocupado porque a pesar de que la materia de “metodología de la investigación” fue el curso que más herramientas me dio para mi campo laboral durante toda la carrera, sigo pensando que es un “ladrillo”, concepto que desafortunadamente coincidía con el de la gran mayoría de compañeros de la facultad. Y esto no es sólo en mi carrera; le pregunté a más de 2 docenas de estudiantes de diferentes universidades y programas y, aunque no fue sorpresa, estaban de acuerdo con mi apreciación. Soy apasionado por la investigación, la enseñabilidad y la promoción de la cultura de la investigación en el pregrado universitario, por lo que me puse en la tarea de buscar información al respecto, y me encontré con dos sorpresas; primera: que no sólo era una apreciación en la mayoría de las universidades de Colombia, sino en universidades de todo el mundo. Pero lo que más me interesó y fue la segunda sorpresa: saber que existen varios grupos de investigación trabajando en este tema, los cuales son de diferentes universidades y territorios nacionales e internacionales. Confieso que es una de las revisiones bibliográficas que he realizado con mayor apasionamiento, lo que me permitió conocer diferentes investigaciones y conceptos al respecto. Por ejemplo, la apreciación del Dr. Jorge Ossa MS PhD, investigador y docente de la Universidad de Antioquia quien se refiere de la siguiente manera a su asignatura: “tiempo atrás se han mantenido los cursos de “metodología de la investigación” prácticamente en cada programa académico con el objetivo mayor de promover la investigación en los estudiantes, sin que el impacto haya sido evaluado a profundidad. La realidad más aparente es que estos cursos no tienen impacto en la formación general ni sobre el objeto específico para el cual fueron diseñados; más aun, es válida la hipótesis de que el efecto ha sido contraproducente”.


El doctor Guillermo Londoño Orozco ayuda y corrobora a esta experiencia del doctor Jorge Ossa. En la investigación sobre "Representaciones sociales de la enseñanza de la metodologia de investigación", desarrollada en el año 2000, encontró a través del estudio de caso, que los estudiantes universitarios tiene una "representación formal de la metodología de la investigación". ¿Qué signfica esta representación? El doctor Londoño dice en primera instancia, que para los estudiantes, la investigación es "algo"- en cuanto no lograna especificar ese algo como proceso, producto, hecho, actividad, etc-especial; es algo es para "gente experta, para científicos y estudiosos que pasan gran parte de cantidad de tiempo entre laboratorios y bibliotecas.

En segunda instancia, la investigación permitió conocer que los estudiantes se refieren a la asignatura de metodologia de investigación como "algo complejo" para expertos y como un procedimiento formal para la presentación de trabajos. Así mismo el estudio, logró establecer que para los estudiantes los conceptos de método, metodología e investigación son lo mismo. En este sentido, los estudiantes llegan a considerar que en sus proceso de aprendizaje referido a la asignatura de metodología de investigación se han enfrentado a tres polos: 1)La asignatura es un "ladrillo". 2)los contenidos de la asignatura son una "teoría no muy bien comprendida". 3)La asignatura solo presenta unas "reglas de procedimiento instrumental útiles para la presentación de trabajos escritos y no para la realización propiamente dicha de investigación" o para el desarrollo de las competencias investigativas (Colombia: ciencia y tecnología, Vol 22, No 3. Julio- Septiembre de 2004,pp.16-23)

Desde estas dos perspectivas qué se puede concluir con la idea del doctor Ricardo Gomez: Pues bien, entonces la pregunta que debe formularse es ¿Y cómo debe ser la metodología para enseñar la “metodología de la investigación”?. Todos los docentes tienen técnicas y estrategias diferentes y usan múltiples recursos para su enseñanza, pero las estructuras y los resultados son prácticamente los mismos. Esta es la conclusión a la que llega la Dra. Maria Henao Willes PhD, investigadora en educación superior de la Universidad Nacional de Colombia y par académico de Colciencias: “Se encuentra una muy curiosa división del trabajo académico: de una parte, están los profesores metodólogos, expertos en todo tipo de manual para aprender a investigar, pero que casi nunca han realizado una investigación por interés personal porque su dedicación ha sido la docencia especialmente; de otra parte, se encuentran el profesor conocedor del tema específico de investigación, quien no se encuentra investigando. Además aparece otra instancia institucional, que es un consejo de orientación de la investigación, que se encarga de distribuir las responsabilidades entre los profesores y de aceptar los temas”.

Con esta realidad y situación generalizada, muy complejo llegar a interesar a la masa de estudiantes de las universidad, a apreder a investigar. Si enseñar metodologia de investigación no forma investigadores ¿que hacemos los docentes o que deben hacer las universidades para formar investigadores?

Al respecto considero que se deben reformar los cursos de metodología de investigación en la universidad y no deben existir profesores expertos en manuales de metodología de investigación. Los primero que debe comprenderse al interior de las universidades es que "todos los maestros por vocación y profesión son "investigadores", es decir se conciben como "activos investigadores (...) que toman partido ante los problemas y plantean soluciones desde el punto de vista de la ciencia..."

Lo que la universidad debe promover con todos sus "activos investigadores" es
desarrollar las competencias científicas y tecnológicas de los estudiantes de educacion superior. El procedimiento es facil. Primero se debe rebasar las cuestiones de orden curricular. Es decir, no se debe seguir pensando en cuantos Créditos deben cursar obligatoriamente los estudiantes, cuantas asignaturas, cuantas materias. Lo formal-lo curricular- para los estudiantes es lo ladrilludo.

Con los activos investigadores, se debe ayudar a los educandos a sentar las bases que permitan comprender el sentido de la ciencia y su quehacer. Para lograr este propósito dice el doctor Londoño, se debe partir de dos intereses. "En primer lugar, destacar la necesidad de fundamentar epistemológicamente los procesos de formación para la ciencia y la tecnología".
(op cit Colombia: ciencia y tecnología p.17)

Parodiando a Hugo Zemelman, se debe trabajar con los educandos " en la cultura del pensamiento epistémico". ¿Qué es según Zemelman el pensamiento epistémico?. Se contesta diciendo que es el distanciamiento de contenidos elaborados por la teoría, por aquella que ha enmarcado la realidad en un concepto. Por aquella teoría como serie de representaciones, principios, leyes, criterios que apoyan, sustentan o están detrás de nuestras acciones y en las cuales se “enmarcan” nuestras actividades y planes de vida, social, económicos, culturales, políticos, etc.

Pensamiento epistémico es el no atarse, no quedarse atrapado en un concepto x o y gramaticalmente definidos. El pensamiento epistémico es pensamiento categorial y no conceptual. Lo categorial conlleva a que el ser humano se construye en multidimensiones, en múltiples relaciones de tiempo, de contexto, de mundo social, de mundo histórico, de complejidades. El pensamiento epistémico es distanciamiento de lo lineal, de lo formal, de lo homogéneo, de lo simétrico, no esta sometido a las mecánicas celestes de nadie.

El maestro investigador debe contribuir desde cada credito a desarrollar la cultura de la indagación, en tanto que la ciencia y la investigación son procesos formativos no asignaturas. Este proceso ha de llevar a la universidad a "desmitificar la ciencia y la investigación".Jorge Ossa Londoño refiriendose a la investigación dice que "la investigación se ha convertido en un mito inalcanzable" para los estudiantes de cualquier nivel educativo en colombia.Investigar y su sustantivo investigación han sido convertidos en ideologemas que solo se refieren a la investigación profesional; esa que produce "papers"-ojala en idiomas extranjero-y vacunas y patentes; así estas palabras se han vaciado de sentido para la inmensa mayoría de los seres humanos. "ser humano signfica ser curioso. Ser indagador-investigador- no es asunto de élites, de metodologos, de expertos, es connatural al ser humano.(En:Revista Interamericana, Vol 2 No 1 Julio de 2006 p. 53)

En segundo lugar, se debe desarrollar con los educandos las competencias investigativas. ¿Qué son las competencias investigativas?¿Cómo desarrollarlas?

jueves, 11 de diciembre de 2008

INVESTIGACION

LOS 7 PECADOS CAPITALES DE LA INVESTIGACIÓN UNIVERSITARIA

El siguiente artículo llegó a mi correo electrónico por la comunicación establecida con mi profesor de investigación que asesora los estudios doctorales sobre "La educación filosófica en el pensamiento de Estanislao Zuleta". Es un texto de José Padrón Guillén, Publicado en Informe de Investigaciones Educativas, Vol. XVIII. Año 2004, pp. 69-80. Caracas, Noviembre de 2004.

Para todos los lectores que siguen mis huellas de escritura y para los investigadores que buscan comprender la cultura investigativa en sus prácticas pedadógicas, este artículo viene como anillo al dedo. Espero comentarios para darle sentido al discurso del pensador. Hacer posible lo que dice pensador: promover debates, provocar respuestas y "pensar de manera problematica".

Introducción

Estas notas tienen la intención de promover debates en torno al tema planteado. Lo que se afirma aquí va, por el formato del documento, sin un respaldo empírico completo, por lo que, tal como está presentado, no es definitivamente creíble. Sin embargo, un trabajo más extenso, y de formato investigativo, podría proveer fácilmente ese respaldo. Por ahora, estas notas sólo podrían tomarse como suposiciones que podrían ser ciertas y que, en todo caso, pueden ser evaluadas. La intención es provocar respuestas, las cuales hacen falta para arrojar alguna luz sobre este tema. Lo del título, la alusión a los “Siete Pecados Capitales”, es una metáfora rayada que sólo sirve para ubicar estas ideas en el mismo estándar de otros documentos de crítica que usan esa misma expresión (entre otros, véase “Los 7 Pecados Capitales de la Universidad” o “Los 7 Pecados Capitales de América Latina”). No hace falta decir que todo lo expuesto aquí es una crítica muy general, referida a una tendencia global, no absoluta; por tanto, como en todo, hay muchas y muy positivas excepciones.

1. La desarticulación y fragmentación (la Torre de Babel)



Los trabajos de investigación no suelen tener nada que ver unos con otros. Si Ud. revisa cualquiera de los compendios de resúmenes de investigaciones que se suministran en las jornadas de investigación de las universidades, difícilmente conseguirá en ese compendio dos investigaciones que tengan algún parentesco entre sí. Es algo así como la construcción de la Torre de Babel, cuando cada obrero hacía algo que no tenía nada que ver con lo que hacía otro, porque cada quien hablaba un lenguaje diferente y tenía un plan diferente, que resultaban inaccesibles a los demás.

Si algo en este mundo debe estar interconectado es precisamente la producción de conocimiento científico. Este tipo de producción se da en forma de constelaciones y redes, que van progresando hacia delante y engrosando en espiral, cada vez más complejas y abarcantes. Pero la investigación universitaria tercermundista es tartamuda y esquizofrénica, terriblemente fragmentada: no sólo no progresa en forma de constelaciones sino que ni siquiera tiene trayectoria alguna de desarrollo en el tiempo. Los trabajos de investigación nacen y mueren dentro de los límites de las circunstancias de un momento y de una persona. Cada quien decide qué problema va a resolver y cada estudiante anda por allí mendigando entre profesores y asesores algún tema de estudio interesante para su propio trabajo de grado o de ascenso.

Pero esta desarticulación ocurre también con respecto a la misma universidad. Pregunte Ud. a las autoridades universitarias cuántos investigadores tienen y lo saturarán con cifras y gráficos de barra. Pero pregúnteles qué problemas científicos ha ido resolviendo su universidad a través del tiempo y obtendrá un silencio incómodo o una respuesta desviada.

La cultura predominante es la de la época de los mecenas, donde el investigador hace lo que le venga en gana, mientras que la ganancia de la universidad está en pregonar la cantidad de investigadores que alberga, sin importar y sin estar enterados de qué hace cada uno. Así, las universidades se convierten en mecenas y los investigadores en artistas. De por medio está la idea de que hacer investigación es como hacer carrera en Hollywood, en pos de un Oscar (léase PPI, en Venezuela), que es esencialmente diferente a la idea de que hacer investigación es como cumplir la labor de una abeja en la construcción de un panal o el rol de un jugador en un equipo de fútbol.

2. El Individualismo (el ‘yo’ por encima del ‘nosotros’)



La investigación universitaria tercermundista está enfocada bajo una concepción individualista de la universidad, derivada de una visión también individualista de la sociedad. La visión individualista es opuesta a una visión colectivista. Las diferencias entre ambas visiones pueden describirse como sistemas antagónicos de creencias, de las cuales los siguientes pares de proposiciones (a-d) son representativos:

a1) En la visión individualista: La felicidad de una sociedad es igual a la suma de las felicidades individuales

a2) En la visión colectivista: La felicidad de una sociedad es mucho más que la suma de las felicidades individuales

b1) En la visión individualista: Cada quien puede ser feliz, aunque los demás no lo sean

b2) En la visión colectivista: Nadie puede ser feliz si los demás son infelices

c1) En la visión individualista: El Bienestar del individuo depende no sólo de su propio progreso sino también del retroceso o estancamiento de los demás

c2) En la visión colectivista: El bienestar del individuo depende del bienestar de los demás; el retroceso de los demás impide el progreso propio

d1) En la visión individualista: Ante la brecha entre pobres y ricos, se trata de esforzarse por pertenecer a la clase de los ricos

d2) En la visión colectivista: Ante la brecha entre pobres y ricos, se trata de esforzarse por reducir esa brecha.


Las universidades tercermundistas fueron diseñadas como mecanismos de ascenso social dentro de ese esquema piramidal de progreso que es típico de la visión individualista, donde no todos pueden llegar a la cima, sino sólo algunos, no necesariamente los mejores, sino los más hábiles en empujar a los demás hacia abajo. Es así como más del 80% de los egresados universitarios tercermundistas son personas que ascendieron desde un origen marginal, nacidos en una familia de pobreza extrema, hacia un estatus de clase media (de allí, viven en la esperanza de que, así como saltaron de la base al sector intermedio de la pirámide social, podrán también alguna vez llegar al vértice, olvidando aquella verdad matemática que repetían nuestros abuelos: “los ricos están contados”, verdad que constituye la regla básica de toda geometría piramidal; de allí su rechazo a todo lo que huela a marginalidad y a pobreza, a todo aquello que les recuerde su propio origen; de allí también que, cada vez que se planteen conflictos entre pobres y ricos, casi invariablemente se pongan de parte de éstos). Y, al mismo tiempo que todo eso ocurría, las grandes masas poblacionales quedaban fuera del sistema educativo, fuera de este mecanismo de ascenso social. ¿Por qué? Porque las estructuras individualistas son geométricamente piramidales, mientras que las estructuras colectivistas son geométricamente rectangulares o cuadradas.

Como resultado global de todo esto, las sociedades tercermundistas están integradas por un mínimo grupo ubicado en el vértice, dotado de todos los privilegios posibles, por una numerosísima masa estancada y agonizando en la gran base y, en el medio, por una clase profesional que está al servicio del grupo de la pirámide, sustituyendo así a los esclavos de otras épocas, pero ahora con un título universitario.

En esa misma secuencia de hechos, la investigación universitaria, que es uno de los componentes internos de ese mecanismo de ascenso individualista, también está basada en la misma concepción y su configuración es estrictamente isomórfica. Es por eso por lo que muchos investigadores utilizan su función científica para ascender en estatus y para “superarse”, en términos piramidales individualistas. Es por eso por lo que la máxima aspiración de muchos investigadores tercermundistas no es resolver problemas científicos en beneficio de los sectores más amplios de la sociedad, aquellos que sobreviven en la base de la pirámide, sino en la minúscula idea de ver publicado su reporte de trabajo en una revista indizada, preferiblemente del exterior y, mejor, en inglés, aunque sólo sea una triste réplica al servicio de algún científico de algún centro de investigación internacional prestigioso. Mientras allá no pasarían de ser oscuros asistentes de investigación, secretarios o ayudantes de equipaje, aquí se muestran como eminencias de la investigación científica, merecedores de todo tipo de financiamiento institucional y de prebendas.

Esta configuración, por otra parte, es promovida por los mismos organismos oficiales (los modernos mecenas) a través de un sistema de estímulos que premia a los individuos y no a las soluciones gestadas por las constelaciones o redes de investigación. En Venezuela, por ejemplo, los organismos oficiales otorgan diferentes grados de estatus académicos y económicos, como PPI y CONABA, exclusivamente a las individualidades, mientras no contemplan ningún estímulo a las respuestas investigativas ubicadas en redes de trabajo y derivadas de esfuerzos colectivos. Esto hace que nuestros pobre profesores universitarios anden constantemente a la caza de credenciales y constancias que les permitan ascender en la pirámide individualista del mecenazgo investigativo: algunos solicitan a sus amigos que los citen en algún artículo próximo a publicarse o que les publiquen algún trabajo o que les expidan certificaciones que puedan incrementar sus opciones al premio…, y muchas otras situaciones que sacrifican la dignidad de un académico en aras de un reconocimiento por parte de los mecenas y, por tanto, de sus posibilidades de escalar en la pirámide individualista. Muchos investigadores se niegan, por ejemplo, a facilitar sus trabajos para que sean difundidos desde sitios web de carácter científico-académico (es decir, a que tengan un impacto masivo grande) sólo por el hecho de que en ese caso su trabajo ya no podría ser aceptado por las revistas indizadas, las cuales exigen originalidad y primicia. En otras palabras, prefieren el reconocimiento de sus mecenas antes que el impacto beneficioso que su trabajo podría tener en las grandes masas de lectores. Visto así, los sistemas como los del tipo PPI y CONABA de Venezuela, vienen a ser una increíble aberración del modelo individualista y toda una perversión de la actividad científica.

3. Investigar por investigar (el proceso y no el producto)



La universidad tercermundista, en general, no se interesa en productos de investigación, sino en procesos de investigación. No les importa lo que se produzca, sino sólo aquellos elementos que puedan llevar a pensar que se hace investigación. Aquí radica una de las más graves contradicciones desde el punto de vista de cualquier teoría de la acción racional: el interés radica en promover la investigación, en destacar que se hace investigación, en convocar a eventos sobre investigación y miles de cosas más orientadas a la investigación como proceso, pero jamás en atender a los productos ni al modo en que tales productos puedan ser aprovechados o utilizados. En efecto, pregúntese sólo lo siguiente: ¿sabe Ud. a dónde van a parar los resultados de la investigación universitaria tercermundista? ¿Sabe Ud. para qué sirven? ¿Sabe Ud. a quiénes va dirigida, quiénes son sus usuarios y beneficiarios?

Los centros u órganos de gestión, financiamiento y promoción de la investigación en nuestras universidades tercermundistas se preocupan por los formatos de solicitud de financiamiento, junto a múltiples detalles de carácter burocrático, pero no les pasa por la mente preguntarse cómo se utilizarán sus resultados ni en qué sector de la sociedad podrían ser ubicados. Se contentan sólo con saber que habrá una investigación y que ésta se llevará a cabo de acuerdo a los cánones burocráticos.

Lo absurdo de esta situación puede verse con claridad si lo comparamos con una industria de producción de salchichas, por ejemplo. Imaginemos que alguien monta una industria de ese tipo y que contrata toda la maquinaria, todo el personal y toda la infraestructura y permisología que se requiere. Contrata a los proveedores de la carne, los molinos y máquinas procesadoras, las envolturas, los condimentos, las empacadoras, los expertos, los obreros, los supervisores, etc. Bien, al final tenemos una enorme cantidad de salchichas producidas, todas ellas muy bonitas y apetecibles, pero apiladas en un rincón o en unas neveras, sin que nos preocupemos por decidir a dónde van las salchichas producidas. Y, aunque no sepamos cuál es el destino del producto, nos alegramos y celebramos y premiamos a todo el personal por su insigne habilidad en la producción de salchichas. Designamos como PPI nivel 1 a algunos miembros del personal y a otros como PPI nivel 6. Y a todos les asignamos un complemento de sueldo en atención a esa escala. Pero las salchichas siguen apiladas en un rincón o en una nevera, hasta que se descompongan, sin que ni siquiera nos preguntemos dónde vamos a colocar el producto y sin contar con transporte ni flete ni listado de clientes, o sea, sin noción alguna de mercadeo, colocación, venta, recuperación de la inversión, etc.

Pues bien, por más que este ejemplo parezca una película surrealista, esa es exactamente la tendencia general de la producción de investigaciones en nuestras universidades tercermundistas. Ni más ni menos. En nuestras universidades duermen el sueño de los justos miles y miles de investigaciones valiosas, que no tienen nada que envidiar a las de los países primermundistas. Sin embargo, no sólo no han sido gestionadas como producto, sino que ni siquiera sabemos que están allí. Nadie las lee. Ningún núcleo de tomas de decisión las usa. Se descompusieron, igual que las salchichas del ejemplo, aunque sus autores tengan buenos incrementos de sueldo a raíz del trabajo realizado. La pregunta obvia es: ¿cómo puede hablarse de “gerencia”, “gestión” u “organización” de la investigación mientras sólo se considere el proceso y se olvide por completo el producto y sus mercados?4. Dependencia y colonialismo (imitación, réplica y subordinación)

Las relaciones entre las esferas nacional e internacional en lo concerniente a producción de conocimiento científico es una perfecta réplica de esas mismas relaciones en lo concerniente a producción económica global y a regulaciones de dominación socio-política. Así como somos países tercermundistas, colonizados y dominados desde un punto de vista político-económico, así también somos investigadores tercermundistas, colonizados y dominados desde un punto de vista científico-tecnológico e investigativo.

El liderazgo en las producciones teóricas está en manos de los países industrializados, mientras que en nuestros países nos limitamos a investigar sobre las huellas trazadas a partir de ese liderazgo. Allá se hacen las teorías y aquí se hacen los chequeos, las seguidillas, las imitaciones y las aplicaciones. Nuestras investigaciones no suelen ser bien vistas si no citamos a los ‘grandes’ autores, que, por supuesto, no son autores criollos: nuestros propios jurados y evaluadores a menudo consideran poco interesante cualquier trabajo que construya teorías propias con independencia de las teorías de los grandes centros investigativos de los países industrializados, de modo que nuestra única opción consiste en producir conocimientos y tecnologías obedientes a las pautas y lineamientos de la investigación del primer mundo. Es en los grandes centros investigativos internacionales donde se arma el piso académico de control científico y de influencia al cual sólo acceden los autores que ejercen ese control.

Ha sido así cómo en el área de las Ciencias Sociales, por ejemplo, numerosísimos estudios de gran valor científico producidos en los países subdesarrollados han muerto en el anonimato total, mientras que abundantes trivialidades y grandilocuencias de ciertos autores han recorrido el mundo como todo un boom intelectual (recuérdense los planteamientos de Sokal y Bricmont, el llamado “caso Sokal”). Preguntémonos si hay algún investigador tercermundista que sea internacionalmente reconocido sin haber salido de su país y sin haberse inscrito en alguno de los centros académicos internacionales influyentes. O preguntémonos si hay en el tercer mundo algún centro de producción científica que tenga el mismo rango de influencia y prestigio que el estándar de los centros científicos de los países del primer mundo.

Algo de esto fue sugerido hace años por Thomas Kuhn. Lástima que éste no llegó al fondo del asunto, al de las relaciones socio-políticas de dominación y al de la filosofía del individualismo, que es la misma filosofía de la ley de la selva.

En el tercer mundo muchos investigadores “bailan al son que toquen” los investigadores del primer mundo. Cuando en el primer mundo se hablaba, por ejemplo, de “Conductismo”, aquí nos vimos obligados a estudiar e investigar sobre lo que escribían Skinner, Bloom, Gagné, etc. y toda la planificación educativa para nuestros pobres pueblos se fundamentó absolutamente en los diseños instruccionales conductistas. Después cayó el conductismo y se impuso el mal comprendido “Cognitivismo” y entonces todos en el tercer mundo tuvimos que seguir a Ausubel y compañía. Después vino el inefable “Constructivismo”, el gran enredo, y entonces nos perdimos en una gran estopa intelectual y ahora nos hallamos mucho más enredados que nunca con el Postmodernismo y la Fenomenología radical.

Este gran pecado capital no radica en el ventajismo de los poderosos ni en su ejercicio de dominación. La culpa es menos de ellos y mucho más de quienes son sus víctimas. Es más bien la falta de nacionalismo a la hora de abordar la ciencia y la investigación, la falta de visión de los horizontes de dominación dentro de los cuales se manipula la ciencia y la investigación. Lo malo no está sólo en las ansias de sometimiento del poderoso sino también en la sumisión del oprimido quien, en vez de buscar liberarse y fortalecerse, se empeña en parecerse al dominante. He aquí el gran pecado capital: al vernos sometidos y dominados, no buscamos liberarnos mediante nuestras propias fortalezas, sino que admiramos al dominante e intentamos negociar con él e imitarlo, buscando pasarnos a su propio bando. Ese parece ser el esquema de la llamada “superación personal” dentro de esa filosofía individualista y subdesarrollada que domina también casi todo el panorama de la investigación científica en nuestros países tercermundistas.

La investigación medicional, de base probabilística, que prevaleció en nuestros países hasta hace alguna década, es un ejemplo adicional de este pecado capital: nuestros investigadores y epistemólogos siempre creyeron que ese era el modelo de investigación “positivista”: chequear las relaciones entre una variable independiente y un determinado efecto, mediante procedimientos correlacionales o causales de mecánica estadística y cuantitativa. No se dieron cuenta de que en realidad ese no era el modelo positivista sino apenas el esquema parcial de la fase contrastivo-experimental de todo el programa de investigación, que comenzaba en planteamientos generales diseñados en los grandes centros de liderazgo investigativo. Nadie vio a Skinner, por ejemplo, haciendo análisis de varianza ni regresión múltiple. Él y su equipo diseñaban ciertas suposiciones y luego toda una pléyade de sus propios estudiantes y seguidores inmediatos allá mismo, más los investigadores tercermundistas de acá, realizaban el trabajo mecánico de chequeo medicional que luego retornaba a la cúpula líder de la investigación, que era donde estaba el control de todo el asunto y que se aprovechaba del trabajo de las hormiguitas. Éstas, por su parte, jamás se enteraron de que existía la noción de “programa de investigación” ni, mucho menos, fueron capaces de diseñar alguno de esos programas dentro de su propia región. Nuestros profesores de metodología de esa época se encargaron de hacernos creer que investigar era medir relaciones entre variables: la “operacionalización del problema”, la “delimitación del problema”, las “variables”, las “muestras”, etc., constituyeron las claves de esa enseñanza. Es decir, no nos enseñaron a investigar, sino a hacer el trabajo de hormiguitas que se solicitaba en el mundo industrializado.

Y luego, más recientemente, con el auge de la mal llamada “investigación cualitativa”, se nos quiere hacer ver que aquel era el nefasto modelo positivista, ocultándonos que era más bien el nefasto modelo de dominación científica, con lo cual algunos de los “nuevos paradigmas” se hacen pasar por avances epistemológicos cuando en realidad repiten ese mismo modelo de dominación, esta vez con un disfraz más colorido y variopinto. Ahora enseñan a nuestros investigadores a trabajar para los mismos patronos, pero con un cierto “nuevo” esquema que, por cierto, también es totalmente importado.

El hecho es que continuamos sin diseñar grandes programas de investigación que cohesionen nuestros esfuerzos individuales en función de unos objetivos de investigación autónomos, líderes en sí mismos, ajustados a nuestras propias necesidades de conocimiento y que puedan competir y penetrar en los centros mundiales de la ciencia. Mientras eso no ocurra seguiremos, como investigadores, siendo colonia del imperio y seguiremos deslumbrándonos con los espejitos que nos traen los conquistadores. Por lo pronto, en el caso de las Ciencias Sociales, estamos embelezados con los espejitos del postmodernismo y de los paradigmas “emergentes”.

Se entiende cuando Bunge sostiene que el ‘Nacionalismo’ no aplica a la Ciencia y que ésta no tiene geografías, pero esto sólo es cierto desde un punto de vista epistemológico y lógico-metodológico, en el sentido de que una teoría es tal cosa por sus propias estructuras y no por el sitio en el cual se construyó ni por su autor ni por su momento histórico. Pero el problema es de tipo pragmático: jamás podremos evaluar una teoría ni podremos contar con todas las teorías posibles respecto a un problema si para las comunidades científicas sólo son teorías las que se diseñan en los países industrializados y si las teorías provenientes del tercer mundo son ignoradas. El nacionalismo científico es una crítica a este tipo de discriminaciones. De hecho, sobran los ejemplos históricos de teorías célebres que ya habían sido formuladas tiempo atrás por algún autor que había trabajado en la sombra (los casos de Peirce y Vigotsky son emblemáticos). Esta discriminación repercute sobre el plano epistemológico desde el momento en que sobre cierto problema existan teorías adecuadas que sean ignoradas por las comunidades científicas, generándose así una traba para las nociones de “acumulación” del conocimiento y de aumento de “verosimilitud” de Popper.

5. Orfandad epistemológica (la falta de raíces y de visiones amplias)



En nuestros países no se suele profundizar en qué es la investigación, qué es lo que estamos haciendo, por qué trabajamos del modo en que trabajamos ni a qué obedecen o sobre qué se fundamentan las tomas de decisión dentro de la actividad de investigar. Simplemente aprendemos un cierto modo de hacer las cosas, una cierta rutina, y continuamos por ese camino como si tuviéramos gríngolas. Por encima de todo eso están nuestros inefables y nunca bien ponderados profesores de Metodología, la mayoría de los cuales raras veces investiga, pero sí se empeña en decirnos cómo tenemos que investigar.

Esto ocurre de dos modos diferentes: en unos casos se ignora que detrás de la acción investigativa (y, en general, detrás de toda acción racional) hay todo un trasfondo sobre cuya base se legitiman y validan todas nuestras posibles operaciones y opciones de trabajo. Esto sucede cuando los investigadores ignoran todo respecto a las Teorías de la Investigación, algo así como si un médico, por ejemplo, ignorara todo respecto a las teorías biológicas o como si un ingeniero civil ignorara todo respecto a las teorías matemáticas.

En un segundo tipo de casos, se asumen ciertas posturas investigativas sobre la base del proselitismo epistemológico que ejercen ciertos líderes primermundistas y descartamos toda otra opción sin conocerla y sin analizarla. Este es, sobre todo, el caso de las epistemologías del “Paradigma Emergente”, los “Nuevos Paradigmas”, etc., donde se comienza por una acusación y desprecio hacia todo lo que ellos llaman “Positivismo” (donde en un mismo saco se mezclan indiscriminadamente tanto las posturas del empirismo-inductivista como las posturas del racionalismo-deductivista, sin que se sepa qué son ambas cosas) y se termina en una gran ceremonia de alabanzas y rituales al “sujeto cognoscente”, a la “relatividad del conocimiento”, a la “conciencia introspectiva”, a las “limitaciones de la razón”, a la “construcción de la realidad”…, y muchas otras etiquetas del género.

Mientras la inconsciencia epistemológica en el primer tipo de casos podría calificarse de rutinaria o ciega, la del segundo tipo podría calificarse de anárquica (incontrolada) y prejuiciada (desde el momento en que se desechan otras opciones epistemológicas sin conocerlas).

Hace unos diez años, la situación más corriente era la del primer tipo y aun en las escuelas de medicina o de agronomía o zootecnia, por ejemplo, todavía hoy en día se mantiene: los investigadores juran y perjuran que investigar es única y exclusivamente eso mismo que ellos hacen. Las gríngolas no les permiten imaginar que de lo que se trata es de resolver un problema o de responder una pregunta y que para ello hay infinitas maneras de operar, hay múltiples sistemas estratégicos, siempre con la máxima rigurosidad, sistematización y eficiencia, y que, además, la creatividad y la inventiva son elementos íntimamente ligados a las propias formas de resolver problemas y de responder preguntas. Pero no: ellos fueron educados en la convicción de que ‘Creatividad’ e ‘Investigación’ son cosas excluyentes, de que ‘Imaginar’ y ‘Hacer Ciencia’ son cosas opuestas y de que una cosa es el ‘Científico’ y otra cosa es el ‘Humanista’. Olvidan que también en las cuestiones ‘humanas’ existen preguntas que responder y problemas que resolver y, por tanto, también allí existe la ‘Ciencia’. Si se hubieran respetado siempre estas absurdas convicciones, jamás habríamos tenido a un Einstein ni a un Chomsky, por sólo citar a dos científicos, uno de “Ciencias” y otro de “Humanidades”, cuyos éxitos científicos se basaron precisamente en imaginar formas diferentes de resolver problemas y de responder preguntas.

Pero recientemente, sobre todo en Ciencias Sociales, la situación más corriente es la del segundo tipo, aquella que presume de la máxima sabiduría epistemológica con un discurso grandilocuente acerca de la “Epistemología”, los “Saberes”, “el Fracaso de la Razón”, la “Modernidad y la Postmodernidad”, etc., dando la impresión de que dejaron de lado las maneras ciegas y rutinarias de investigar y pretendiendo que se dedicaron a atender las raíces epistemológicas de la investigación. En realidad, se trata de toda una enorme estafa a gran escala. Nos quieren hacer creer que se orientan al abordaje del fondo epistemológico de la actividad investigativa, cuando en realidad repiten lo que han asimilado del proselitismo epistemológico proveniente de los países industrializados, especialmente de la llamada “izquierda intelectual europea”, que tiene de izquierda lo mismo que tiene la invasión de USA a Irak y lo mismo que tienen los atropellos a los derechos humanos en Afganistán y Guantánamo, acerca de lo cual buena parte de nuestra intelectualidad europea ha mantenido un conveniente silencio.

En ambos casos, el fondo es el mismo: un punto de vista según el cual investigar es un patrón dictado por alguna autoridad y no una forma genuina y autónoma de aproximarse a la solución de un problema bajo los métodos que resulten más diáfanos y eficientes y bajo interminables pruebas y críticas a esos métodos.

La única diferencia en la polémica entre lainvestigación “positivista”, “medicional” o “cuantitativa” y la investigación del “new age”, el “paradigma emergente” y la “investigación cualitativa” está en una orfandad Epistemológica, en el sentido de desconexión de una verdadera Teoría de la Investigación que explique los modos pluralistas en que los seres humanos pueden aproximarse a la solución de sus problemas y a la respuesta a sus preguntas. El pecado está en pasar por alto que las personas, incluyendo a los científicos, tienen diferentes configuraciones cognitivas, diferentes formas de aproximarse a la realidad y que lo importante es averiguar cuáles son esas diferentes configuraciones cognitivas, cómo opera cada una de ellas, cuáles son las compatibilidades e incompatibilidades, cómo podrían orientarse y, sobre todo, cómo una Gerencia de Investigaciones podría administrar todas esas variaciones en función de objetivos institucionales y colectivos previamente diseñados. No se trata de discutir si la fenomenología es mejor que el positivismo o que el falsacionismo, sino de explicar cuáles son, cómo se generan y cómo se interrelacionan las diferencias entre enfoques epistemológicos. El correctivo a este pecado estaría en estudiar a fondo cada uno de los enfoques epistemológicos divergentes, en penetrar profundamente en sus postulados y presuposiciones sin despreciar a ninguno de ellos, sin excluir a ninguno y, al final, en lograr pararse por encima de todos ellos, viendo el paisaje panorámico completo desde arriba, para luego averiguar quiénes creen en unos y en otros enfoques y entonces, desde allí, administrar trabajos colectivos amplios de investigación, basados en agendas de gestión a corto, mediano y largo plazos, bajo diferentes enfoques.

La base de todo esto es que no existe una sola forma de investigar ni existe la mejor manera de investigar ni existe ningún “paradigma emergente” al que todos debamos someternos. En realidad, a estas alturas de la historia humana y a este punto de la evolución del conocimiento humano, nadie está en capacidad de imponer el mejor método ni nadie puede pensar que la especie humana debió esperar tanto tiempo por este supuesto momento de lucidez infinita en que finalmente aparecieron los “nuevos paradigmas”. Todo eso es ilusorio y propagandístico. La verdad es que los seres humanos se diversifican entre sí por sus distinto modos de interpretar la realidad, que esos modos siempre han existido y siempre existirán, que no hay modos nuevos sino evoluciones y repeticiones en espiral y que, en consecuencia, la única opción está en colocarse por encima de todos esos enfoques, en asumir una supra-postura y en trabajar la Epistemología de un modo realmente amplio e incluyente (igual que en la Política y en la Economía, la exclusión siempre es nociva).

6. Desconexión de las demás Funciones Universitarias (autismo universitario)



La investigación tercermundista sigue un camino divorciado de la Docencia y la Extensión universitarias. Es de suponer que la Extensión funciona como subsistema que cubre las relaciones con el entorno, especialmente aquellas relaciones que funcionan en el sentido de la demanda-oferta de conocimientos y tecnologías. La Extensión suele saber mucho sobre el entorno, suele estar al tanto de qué cosas constituyen áreas de demanda y de necesidades y suele también tener buenos datos acerca de cuáles son las áreas de impacto e influencia hacia las cuales la universidad podría dirigir sus producciones científicas y tecnológicas. Es en realidad en todos esos datos de la Extensión universitaria donde la Función de Investigación debería encontrar las redes de problemas investigativos que luego pudieran ser traducidas en programas y agendas de investigación ejecutables a corto, mediano y largo plazos. Pero nuestra investigación tercermundista busca sus problemas de estudio en los grandes centros investigativos internacionales y no en las comunidades circundantes. En otros casos, buscan esos problemas en la empresa privada y en las llamadas “Fuerzas Vidas de la Sociedad” (¿o “sociedad civil”?). El desprecio con que en general la Investigación y la Docencia conciben la función de Extensión parece ser el mismo desprecio que muchos académicos e intelectuales suelen sentir hacia las clases populares y hacia las grandes masas de excluidos, tal vez como mecanismo de negación de aquella marginalidad y pobreza de donde ellos mismos provienen, algo así como creer que acercarse al pueblo es perder sus nuevas condiciones de clase media en ascenso o retroceder en lo que ellos consideran ‘superación personal’ dentro de un esquema individualista.

La Docencia, por su parte, tampoco se nutre en lo más mínimo de los conocimientos y tecnologías producidos por la Investigación realizada en la propia universidad. Todos parecen haber olvidado que los contenidos curriculares, eso que se transmite a nuestros estudiantes, son productos investigativos, son teorías y aplicaciones que fueron producidas en las esferas del mundo de la investigación. No son informaciones nacidas por generación espontánea: por cada una de tales informaciones existe toda una historia del proceso de investigación a través del cual se llegó a ella. Como dice Wagensberg en “A Favor del Conocimiento Científico”:

Existen métodos para crear conocimiento y métodos para transmitir conocimiento. A lo mejor, y en ausencia de más información, resulta que el mejor método para transmitir un cierto conocimiento es el mismo que se ha utilizado para crearlo. Es muy posible incluso que la idea de pedagogía, entendida como un conjunto de técnicas destinadas a transmitir cualquier tipo de conocimiento, sencillamente no tenga sentido (en http://www.gva.es/publicaciones/revista/rvea23/Museos-6.html)

Dicho de paso, esto implica que los contenidos curriculares no son verdades definitivas, no es información necesariamente correcta, debido a que son productos investigativos y, como ya se ha demostrado, de esa clase de productos sólo podríamos descubrir sus errores, pero jamás podríamos estar seguros de su verdad. Esto contrasta con la firmeza y seguridad con que nuestros docentes les transmiten esos contenidos a sus estudiantes, así como la compulsión con que les exigen su ‘aprendizaje’, más allá de toda oportunidad para la duda y la crítica.

Pero lo importante del hecho de que todo contenido curricular es un producto investigativo es que en la universidad tercermundista ese contenido viene importado de los grandes centros académicos del primer mundo y no del trabajo que podría realizarse dentro de la Función de Investigación de la misma universidad o de otras universidades tercermundistas. Claro, la responsabilidad no es sólo de la Docencia, sino, precisamente, de la Investigación: desde el momento en que ésta sólo busca sus problemas en el primer mundo, tampoco producirá conocimientos y tecnologías aprovechables para la Docencia. Mientras la investigación tercermundista esté al servicio de los intereses del mundo industrializado, divorciada de la Función de Extensión, tampoco estará en capacidad de alimentar los contenidos curriculares en las aulas de clase.

Al final, tenemos una Docencia cuyos contenidos curriculares están en los libros de la colección Schaum de la McGraw-Hill, por decir algo, pero no en las teorías que pudieran generarse en la Función de Investigación de la propia universidad. ¿De qué hablan, por ejemplo, nuestros tesistas en las área de Educación o de Lenguaje o Letras? De constructivismo, de cognitivismo, de estructuralismo…, de Levy-Strauss o de Foucauld, etc. Pero, sólo por seguir con este ejemplo, ocurre que en Venezuela, para citar un país tercermundista, solamente en el viejo Instituto Pedagógico de Caracas hubo entre los ’50 y los ‘80 toda una constelación de investigadores cuyo trabajo no es para nada inferior a los de los grandes autores ni a los de las grandes escuelas norteamericanas y europeas. Pero nada de esto fue incorporado a los contenidos curriculares de la Docencia y muy pocos hoy día reconocen los nombres de esos excelentes investigadores.

Un dato curioso para ilustrar esta desconexión de la Investigación con la Docencia está en el régimen de los Trabajos de Grado y Tesis Doctorales. Éstos no suelen ser considerados dentro de los planes de la Función de Investigación, sino de la Docencia y de las cátedras de Metodología y de Seminarios de Trabajo de Grado. En muchos documentos institucionales se lee que la función del Trabajo de Grado es “demostrar competencias metodológicas”. Es decir, su función no es investigar, no es producir conocimientos y tecnologías, sino demostrar que aprendieron lo que se les transmitió dentro de la Función Docencia y dentro del currículo, lo cual constituye todo un absurdo. Resulta que todos esos trabajos de grado de nuestros estudiantes podrían ser aprovechados por la investigación universitaria para el desarrollo de sus propias agendas, sobre todo por la importante cantidad de mano de obra implícita en esas grandes masas de graduados que egresan semestre a semestre, más su incontaminación académica y su disposición al trabajo. Sin embargo, la Función Investigación de la universidad tercermundista subestima y desperdicia toda esa enorme oportunidad de los Trabajos de Grado para resolver problemas científicos y para desarrollar sus propios programas (si los tuvieran, por supuesto). En el fondo, está implícito que la Docencia no sabe qué es investigar y que la Investigación no tiene nada que ver con la Docencia.

7. El dominio de la Burocracia (la inteligencia controlada por el analfabetismo poderoso)




En todas las universidades hay dos tipos de personajes claramente definidos: los Burócratas y los Académicos. Ya sabemos que en toda organización, definida por unos procesos que conducen a unos productos terminales, la Burocracia equivale a los sistemas de ordenamiento y control del modo en que los contenidos de trabajo fluyen desde su punto de partida hasta su punto de llegada a través de las arterias o trayectorias de proceso. La Academia, en cambio, equivale al contenido sustantivo de lo que fluye por esas arterias y trayectorias. La Academia se dedica, por ejemplo, a investigar sobe un problema, mientras que la Burocracia se dedica a controlar la permisología requerida, los tiempos de ejecución, los trámites para actuar… y aún a designar quiénes deben desempeñar tales o cuales funciones y cargos dentro del sistema de producción. Hasta aquí todo luce muy bien.

Las dificultades empiezan cuando la Burocracia, percatándose de la gran oportunidad de poder que representa el control sobre el flujo de los procesos y sobre las personas que actúan en lo sustantivo de la producción, comienza a explotar esa oportunidad. Aprovecha entonces ese poder para su propio beneficio personal y no para el beneficio de la organización, pasándose así del plano colectivo al plano individual en función de intereses de dominación. De allí en adelante, entramos en el terreno de las perversiones organizacionales. La perversión burocrática consiste en chantajear a las personas ubicadas en los procesos sustantivos o en reorientar los controles en su propio beneficio, para así ir ganando cada vez más poder e ir ascendiendo en la misma pirámide organizacional. La perversión académica consiste en negociar con la burocracia perversa a cambio de ciertos privilegios y en ablandar la calidad de su propio trabajo, haciéndolo vulnerable a la burocracia y dándole así mejores oportunidades de acceso y de control.

En nuestras universidades tercermundistas, el Burócrata casi invariablemente pertenece al rango de la perversión. El Académico es todavía mucho menos contaminado, pero en todo caso tiende a ser víctima del Burócrata y, con el tiempo, tiende a pervertirse. El Burócrata, así entendido, es un individuo que trabaja en la sombra y en la oscuridad de los ataques por sorpresa, de los arreglos inesperados y de los chantajes, que dedica sus días y sus noches a planificar cómo hacer caer o hacer subir a alguien dentro del sistema organizacional, siempre en función de sus intereses de poder. No le interesa la universidad, sino su propio ascenso dentro de la misma, pero no por méritos académicos, para los cuales suele ser totalmente incapaz, sino por mecanismos burocráticos perversos, en los cuales desarrolla sus experticias. En efecto, en buena parte de los casos el Burócrata es prácticamente un analfabeta en investigación. Muchos de ellos suelen ser universitarios que nunca leen, porque no entienden los contenidos científicos. Pero con sus progresivos incrementos de poder a través del tiempo, van escalando posiciones y desarrollando cada vez mejores tácticas de chantaje y control.

En general, apartando las muchas y honorables excepciones, el Burócrata llega a ser rector, vice-rector, decano, director de escuela… y coordinador de investigación. O, dicho al revés, una buena parte de nuestros rectores, vice-rectores, decanos, directores de escuela… y coordinadores de investigación, con las muchas excepciones ya consideradas, son básicamente Burócratas y controlan la producción investigativa en las universidades, lo cual explica parte de la ineficiencia y subdesarrollo de la misma en los países del tercer mundo.

Conclusión

La investigación universitaria tercermundista es una muestra más del subdesarrollo por efecto del colonialismo e imperialismo y de la opresión que se ejerce sobre nuestros pueblos por parte de los dominantes, en todos los niveles, macros y micros. La erradicación del efecto de la exclusión social, de la pobreza y de la marginalidad es condición indispensable para el progreso de la investigación universitaria. Si eso no se cambia, no podremos seguir hablando de cosas como Metodología, Epistemología y Organización de la investigación universitaria.

Notas: Las fografias son de imágenes de Google.Se reconocen los derechos de autor y se utiliza con fines didácticos no comerciales.

viernes, 23 de mayo de 2008

¿Cuáles son las experiencias más significativas del loboratorio de imaginación y ciencia?

LAS PRIMERAS EXPERIENCIAS DE UNA INICIATIVA DE AULA DESARROLLADA POR ESTUDIANTES

"Lo más excitante que puede oirse en ciencia no es eureka!
sino qué divertido"
Stephen Hawking



Con una divertida y creativa serie de ensayos, experimentos, mapas conceptuales, carteras, afiches de científicos y conversaciones sobre ciencia y astronomía, los estudiantes de segundo semestre de Enfermería y Terapia Ocupacional de la Universidad Mariana, a cargo del profesor Héctor Trejo Chamorro, desarrollaron el primer Laboratorio de imaginación y ciencia.

Este evento tuvo lugar en el hall principal del bloque Madre Caridad, donde los estudiantes por medio de pequeños experimentos, mapas sobre conocimiento, ciencia e investigación, preguntas importantes sobre el mundo científico buscaron resolver diferentes inquietudes que el ser humano no ha podido resolver, motivaron a los estudiantes a desarrollar la actitud científica y abrieron el camino para hacer de la epistemología una herramienta para pensar y devenir sentidos investigativos y científicos en la universidad.

El docente investigador Magister Héctor Trejo Chamorro manifestó que "El primer Laboratorio de Imaginación y Ciencia es un Proyecto Pedagógico de carácter científico que familiarizó a los estudiantes en el conocimiento de la ciencia, la investigación y la tecnología. A través de diferentes estrategias se buscó promover en los educandos las competencias científicas, el pensamiento epistémico y la capacidad de asombro. Inicialmente se preparó una serie de tareas para motivar a los educandos en el laboratorio, por ejemplo la Catedra de la imaginación y la ciencia, luego se pensó en la feria de ciencia y finalmente se dijo que el evento sería un primer laboratorio.

En este contexto sobrevino el escepticismo y algunas resistencias, pero mediante la motivación constante y el trabajo en equipo, los estudiantes demostraron que la imaginación, la creatividad, la admiración, la experimentación, la lectura y el espíritu de trabajo colaborativo valen más que los fantasmas que recorren las aulas de la universidad como son el aburrimiento, la pereza mental, la inercia de pensamiento, la educación memorística, entre otros".

El estudiante de décimo semestre de Comunicación Social y Periodismo, MARIO FERNANDO ARTEAGA, se hizo presente en el evento y entrevistó al Dr Alberto Quijano Vodniza, invitado especial al Laboratorio. El doctor Quijano Vodniza es profesor de la Universidad de Nariño, director del Observatorio Astronómico de la misma universidad, y uno de los astrónomos colombianos más reconocido a nivel nacional e internacional, orgullosamente Pastuso. De la entrevista se resalta las siguientes apreciaciones sobre los temas del laboratorio, especialmente de las experiencias del doctor con la ciencia y la astronomía. Se trascribe la entrevista desarrollada por el periodista y publicada en www.umariana.edu.co

• Dr. Para usted que es la ciencia?

Antes que nada muchas gracias por esta entrevista, y a los organizadores de este bonito evento por haberme invitado, me llevo una sorpresa enorme y es que se ve que los estudiantes están muy interesados en la ciencia, teniendo en cuenta que ellos no son estudiantes de ciencias puras, de física, química pura o biología, ellos están en otro campo del saber y es una emoción muy grande saber como a ellos les gusta la ciencia, entonces ese es un buen punto para comenzar y avanzar mas rápidamente. Porque hay muchas personas que piensan que la ciencia es una actividad humana bastante aburridora y no es así.

Para mi la ciencia es muy hermosa, ha sido un juego toda la vida, recuerdo que nosotros con mis primos hacíamos y estallábamos cohetes, quemábamos ropa, un día, siendo todavía muchachos, nos estaba gustando mucho esto de la exploración espacial, el hombre ya estaba llegando a la luna, entonces dijimos hagamos un cohete, y lo hicimos con pólvora de la de Catambuco que esa es fuertísima, y estuvimos preparando a cinco moscos durante una semana, los entrenamos a grandes aceleraciones, los preparamos y un 21 (veintiuno) de Diciembre en navidad hicimos el lanzamiento como a las tres de la tarde, pero no sabíamos quien era el que le iba a prender la mecha a ese cohete, entonces por ahí había un primo pequeñito, tenia cinco años y nosotros decidimos que el era la persona mas indicada en caso de que falle el lanzamiento.

Hicimos el lanzamiento en el patio de la casa de mi mama, y resulta que este cohete se estrello con la ropa que estaba secándose, hizo una gran explosión, quemamos la ropa de mis hermanos, y un gato que pertenecía a mi hermana se perdió durante una semana. Después llego mi papa y hasta allí llego la exploración espacial en ese entonces.

• Dr. Que se necesita para realizar un trabajo de investigación?

Para realizar un trabajo de investigación hay que partir del hecho de que uno debe ver en uno mismo, creer que uno puede llegar a otros horizontes que uno los cree lejanos, hay que ser un soñador apasionado, y sobre todo hay que tener mucha constancia para lograr alcanzar lo que uno se ha propuesto.

Es bueno aprender las cosas por cuenta propia, porque lo que mas aprende uno es en la casa, desbaratando y armando cosas, así aprendí electrónica por mi cuenta, hacia experimentos, diseñamos un transmisor, dañábamos equipos de sonido, allí es donde uno aprende, para mi, la felicidad mas grande que uno puede encontrar esta en la ciencia, no esta en otros campos, es una felicidad pura.

• Dr. Es su primera vez en la Universidad Mariana?

No, ya he estado en varias oportunidades que gentilmente me han invitado a dar diferentes charlas, pero la última vez que estuve aquí fue hace como dos años cuando hubo una reunión de trabajos relacionados con el proyecto Ondas. Hoy se mira que muchos estudiantes ya quieren emprender trabajos de investigación entonces eso es muy bueno, hay que seguirlos motivando porque a futuro puede ser muy provechoso para la universidad.

• Dr. En la actualidad que proyectos se vienen adelantando en cuanto al observatorio de la Universidad de Nariño?

Tenemos gran cantidad de proyectos, un proyecto que es bastante complejo es la búsqueda de exoplanetas o planetas que existen alrededor de las estrellas, también esta el proyecto de la creación de un planetario en la ciudad de Pasto, para el cual se han venido adelantando charlas con el director del planetario de Bogotá, con el Gobernador de Nariño y el señor Alcalde de Pasto, ellos a su vez hablaran con el señor Alcalde de Bogotá para ver si el equipo actual del observatorio de Bogotá que va a ser sustituido por uno nuevo, entonces ese equipo que esta allí sea donado a la universidad de Nariño, es un equipo que cuesta alrededor de novecientos millones de pesos, entonces esperamos que ese proyecto se concrete ya que traería mayores beneficios no solo para nuestra ciudad sino para el departamento de Nariño en general.

Otro proyecto que se lo ha venido adelantando, es la creación de un satélite colombiano a bajo costo, que si lo aprueban seria construido aquí en Colombia por universidades e instituciones educativas interesadas. Bajo la dirección del observatorio astronómico de la universidad de Nariño.

A nivel de investigación estamos trabajando en la búsqueda de estrellas, variables de décima magnitud que son estrellas muy débiles y vamos a trabajar con exoplanetas que es lo que en este momento se esta investigando en el mundo moderno.

• Dr. De donde sacan los recursos para el mantenimiento del observatorio?

El apoyo hasta ahora ha sido únicamente de la universidad de Nariño, no ha surgido ayuda del gobierno departamental ni municipal, entonces esperamos que para el nuevo planetario exista ayuda tanto del departamento como del municipio eso ya se sale de las manos de la universidad de Nariño.

• Dr. Por último, un mensaje a todos los estudiantes interesados en el tema de la investigación, la ciencia y por que no la astronomía.

La investigación es un juego hermoso donde se encuentran las mejores satisfacciones que uno puede percibir en la vida, las mejores alegrías, los mejores sobresaltos tanto de alegrías como de tristezas, ya que la investigación no es neutra, no es una actividad aburrida, por el contrario es fantástica. Uno no se puede dar cuenta de esos estados en cierta forma psicológicos y espirituales hasta que uno esta en el campo de la investigación.

Cuando uno hace un pequeño descubrimiento, aunque sea elemental para uno, es gigantesco, uno crece mucho, yo creo que si muchas más personas se preocuparan por el campo de la ciencia, no estaría este planeta en un estado de desastre y violencia que se encuentra, maltratándola y destruyéndola en instantes, sabiendo que al universo le tomo millones de años tomar los elementos de la materia y llegar a crear sistemas complejos de vida, entonces si más personas como en el caso mío se preocuparan por la ciencia, la astronomía, miraran la vida con ojos completamente diferentes y serian admiradores de la belleza y de la vida misma, es paradójico de que los astrónomos estemos buscando vida en otros planetas, en otras galaxias, y que ni siquiera el ser humano respete y entienda la vida de los animales, no entendemos el lenguaje de los delfines, el lenguaje de las ballenas por ejemplo que son seres bastante avanzados en evolución, estamos apurados a buscar vida en otra parte y no respetamos la gran variedad y diversidad de vida que existe aquí en la tierra.


Finalmente queremos resaltar algunos comentarios expresados por los estudiantes de Enfermería y Terapia Ocupacinal:

"El laboratorio de imaginación y ciencia nos sirvió para despertar la creatividad y la generación de ideas, de conocimientos, específicamente de conocimientos científicos"

"El laboratorio fue un espacio para interactuar con otros compañeros de programa y otros programas, para adquirir nuevos aprendizajes y conocimientos"

"El laboratorio permitió el intercambio de ideas, el conocimiento científicos, de las dudas que el ser humano no ha podido resolver, de la necesidad de trabajar en el desarrollo de la imaginación, de aprender a leer textos científicos a través de mapas conceptuales y ante todo de aprender a generar conocimientos científicos"

"El laboratorio nos sirvió para despejar dudas sobre científicos y sobre las experiencias del doctor Quijano sobre el universo".

"Ante todo aprendimos a ser más creativos, a saber indagar sobre problemas de investigación, a encontrar soluciones a problemas, a experimentar estrategias de aprendizaje y solución de problemas, a conocer a profundidad la ciencia y sus métodos de investigación".

miércoles, 7 de mayo de 2008

¿Qué es el laboratorio de la imaginación y la ciencia?

NOTAS SOBRE EL LABORATORIO DE LA IMAGINACIÓN Y CIENCIA
MAYO 13 DE 2008

"Es un milagro que la curiosidad sobreviva a la educación reglada"
Alber Einstein

Presentación

El laboratorio de imaginación y ciencia es una estrategia pedagógica del espacio académico de Epistemologia. Presenta de una manera didáctica las expeciencias que el estudiante aprende al interior del aula sobre los contenidos de ciencia. Tiene el acompañamiento del docente y su acción significativa apunta a desarrollar en los educandos el espíritu cientifico,las competecias investigativas, la imaginación y la creatividad.

Propósito formativo: Familiarizar a los estudiantes de la universidad con los procesos y los conceptos científicos que se están estudiando en el espacio de Epistemología.

Actividades:

1. Explicación sobre las 10 dudas que el ser humano no ha podido resolver.

El 7 de mayo de 2007 el tiempo publicó un artículo referido a la ciencia. En el texto se argumentó que "desde la forma en que funciona la memoria hasta saber cómo comenzó el universo son incógnitas que dan vueltas en las mentes más brillantes del siglo XXI sin lograr conclusión alguna". La oportunidad de seguir pensando sobre ellas llevó a los estudiantes de Enfermería y Terapia Ocupacional en el espacio de Epistemología a buscar nuevas explicaciones, indagaciones y curiosidades más significativas las cuales serán presentadas de una manera creativa en el Laboratorio.

Las dudas son:

¿Cuál fue el primer organismo vivo?
¿Cómo surgió la vida en la Tierra?
¿Estamos solos en el universo?
¿Existe una teoría del todo?
¿Cómo funciona la memoria?
¿Cómo comenzó el universo?
¿Cuál es la mínima unidad de la materia?
¿Qué son los agujeros negros?
¿Qué es la materia oscura?
¿Cómo el ADN y las proteínas hacen funcionar la vida?

2. Presentación y representación de un experimento y explicación del concepto(teoría) científico que subyace a la operatividad mecánica.

3. Socialización de conocimientos sobre científicos que admiran los estudiantes y que de ellos reciben los fundamentos epistémico para la investigación que está en proceso de formularse.

4. Presentación de la Técnica: mapa conceptual como experiencia de aprendizaje y una forma de aprender a leer la ciencia.

jueves, 10 de abril de 2008

¿Qué es la actitud científica?



El siguiente texto es un aporte de la doctora María Olimpia Lockett.

El usuario que desee leer a esta escritora de textos científicos y busque ampliar más su contenido puede consultar en http://eluniversitario.unne.edu.ar/2005/61/pagina/enfoques.htm.

Se han extractado algunas ideas del texto titulado "La actitud científica en la enseñanza universitaria" . El propósito tiene fines didácticos y formativos, en tanto las nuevas preguntas de trabajo en el espacio de Epistemología General, apunta a formar en el educando el pensamiento epistémico y el espíritu científico. Me interesa que este "ferviente anhelo de indagación y búsqueda" lo desarrolle el estudiante que se inicia en el camino de la investigación formativa. Comencemos por entender la siguiente pregunta:

¿QUE ES LA ACTITUD CIENTÍFICA?.

El ser humano tiene distintas maneras de posicionarse frente a las cosas, los hechos, sucesos, fenómenos de la vida cotidiana: observarlos y describirlos, identificarlos y estudiarlos, aceptarlos o rechazarlos, intentar modificarlos, pensar que no le competen o asumir una actitud indagadora.

Cada una de estas actitudes dan cuenta de una manera de ser,de situarse frente al mundo y obedecen a modos distintos de pensar, a lógicas diferentes. Por un lado están los que no buscan explicación a los hechos, ven la realidad como algo determinado, establecido desde siempre y para siempre (toda la vida fue así). Otros en cambio, asumen una actitud crítica, curiosa, abierta, innovadora, creativa y buscan permanentemente el "por qué", una explicación a lo establecido, que no los conforma, intentando modificar la realidad para mejorar la situación.

Los primerosson dogmáticos en tanto que los segundos son críticos. Julián Marías tipifica al hombre en tres categorías:

1)Los que viven fuera de los problemas teóricos. Para ellos la vida no se presenta como un sistema de problemas intelectuales que se formulen racionalmente y a los cuales se responda con un a teoría(el campesino, el pragmático).

2) Los que conocen la existencia de estos problemas teóricos pero le resultan
ajenos, como algo que no existe allí en el mundo circundante
, tal vez para otros, pero no forman parte de su vida. Estos hombres se desenvuelven en el ámbito de la cultura intelectual pero solo quieren informarse(el técnico, el profesional dogmático, el gobernante).

3) Los que se plantean estos problemas teóricos y quieren tener una construcción racional del mundo coherente con una filosofía, una ideología, un paradigma, una
doctrina
: son los filósofos, los científicos, los investigadores, los teólogos.

A fin de reflexionar sobre los distintos perfiles humanos veamos las connotaciones que para cada caso aparecen como características individuales o sociales e inciden en los procesos institucionales. Si bien lo que expongo es producto de la observación cotidiana, queda abierta la posibilidad de intentar un estudio científico, aunque pienso que se trata mas bien de argumentar y dejar abierto el debate.

Comenzaré analizando que significa crítica. Comúnmente al que critica se lo llama despectivamente criticón, quisquilloso. Los sinónimos encontrados para la palabra crítica son: sátira, diatriba, censura, murmuración, detracción, desaprobación y muchas veces se confunde con chisme, cuento, embuste, invención, fabulación.

También significa: análisis, opinión,juicio de valor, evaluación. Los primeros atributos no exigen explicación alguna, simplemente se expresan, en tanto que los segundos son argumentados con exposiciones basadas en teorías diversas provenientes de la lógica, la filosofía, la sociología, la antropología, la psicología.

Ezequiel Ander Egg habla de la actitud crítica que deviene en actitud científica contrapuesta al dogmatismo, a las creencias, a lo que se tiene por establecido; la actitud científica prepara el camino para entrar al mundo de la ciencia por que nos permite discernir, analizar que es lo mas conveniente, para mí y para los demás. Si mi juicio es equivocado acepto la crítica pero intento argumentar para mantener mi opinión hasta que otro argumento, mas convincente, logre demostrarme lo contrario ... y así sucesivamente. No se trata de ganar o perder si no de discutir, analizar, pensar para proceder en consecuencia.

La actitud crítica es indispensable para iniciarse en la investigación y producir
conocimiento científico; esta es la manera en que avanza la ciencia toda vez que los descubrimientos son publicados y sometidos a la crítica. De esta surge una refutación o inspira el estudio de aspectos no considerados.

El conocimiento científico como resultado de las actividades de la Ciencia, aparece como un dato: un número, un porcentaje, un signo, que puede simplemente describirse para ser comunicado o bien buscar significados que permitan interpretar el dato, darle sentido por medio del lenguaje. Para hacerlos creíbles, recurrimos a las teorías generales.

La discusión acerca del carácter científico de la explicación constituye un capítulo aparte, objeto de la epistemología, por lo que no analizaremos aquí. Algunos fenómenos o hechos de la realidad, pueden explicarse empíricamente; otros en cambio,no pueden ser sometidos a un diseño experimental por lo que deben justificarse con los argumentos identificados en las teorías provenientes de la física, la química, la matemática, la lógica.

Cualquiera de los grandes acontecimiento científicos de la historia da cuenta de situaciones como la que vivió Galileo queriendo explicar sus observaciones, puesto que no las podía probar, con argumentaciones teóricas intenta demostrar la valides de sus hallazgos para convencer a los representantes mas conspicuos de la iglesia y de la vida pública , dado que rompía con las creencias del geocentrismo, obstinación que le costó la prisión y la muerte en la hoguera de su seguidor Giordano Bruno.

De igual manera, los hechos humanos que no admiten experimentación deben ser interpretados y explicados teóricamente desde la sociología, la antropología, la
psicología. Hay rasgos que caracterizan a los sujetos que asumen una actitud científica; una de ellas es la capacidad para reconocer las limitaciones y diferenciar la etapa de imprimación, en la que el sujeto no puede establecer relaciones entre los elementos percibidos o representados, de aquella en que puede reconocer que lo registrado por los sentidos no es la realidad sino una fracción o momento.

Esta conciencia abre en el sujeto la posibilidad de darse cuenta que la capacidad de abstracción puede coordinar distintas percepciones e incluso encontrar que entre ellas hay contradicción. Esto último hace a una disposición a lo conceptual, esto es que el sujeto sea sensible a las contradicciones y trate de resolverlas construyendo explicaciones utilizando datos pertinentes y comprobables. Ahora bien, esta disposición a utilizar el nivel de abstracción (la formación de conceptos) para coordinar o dirimir contradicciones entre las percepciones supone la posibilidad del placer mediato. Con frecuencia el sujeto de la vida cotidiana se maneja con la obtención de placeres inmediatistas mientras que, el sujeto de la actitud científica es el que, en alguna medida, puede postergar esos placeres en aras de algún mayor placer pero mediato.

Otra característica de los sujetos que adoptan una actitud científica, es la curiosidad, la observación constante para descubrir lo que subyace en cada situación, lo que induce al individuo a buscar nuevas pautas o modelos, haciendo de ello su objeto de estudio. No creo en logros inmediatos sino al cabo de un largo proceso, sin interrupciones, en el que claramente se evidencien actitudes cotidianas como un modo de vida, una manera de educar en la que el estudiante tenga la oportunidad de reconocer estados conflictivos, darse cuenta que pueden existir situaciones inesperadas y decidirse a enfrentarlas, lo que marcará una evolución en el desarrollo de la personalidad, del conocimiento y de la formación integral.

Los conceptos serán asimilados, aprehendidos, en tanto resulte significativo para el sujeto al punto de encontrar las condiciones que le permitan formular sus propias hipótesis, manifestar libremente sus ideas y descubrimientos. Es en este momento donde el sujeto encuentra su identidad, comienza a interesarse por temas que
cotidianamente no le interesaban y a comprometerse con ideas nuevas siempre que las cuestiones resulten de su interés o le permitan resolver conflictos personales o comunes de su vida de relación.

En nuestra experiencia hemos podido advertir que cuando el alumno logra aprendizajes
significativos, se compromete con el tratamiento de los temas propuestos y realiza trabajos escritos altamente satisfactorios que no se agotan en un requisito formal para la graduación sino que sirve de estímulo para buscar nuevos espacios, nuevas perspectivas.

La pregunta obligada es ¿como despertar la actitud científica?. Hay algo importante que considerar en este punto: la necesidad que exista una congruencia entre lo que se propone y lo que se practica. La mayoría de las carreras universitarias expresan en los propósitos u objetivos del curriculum: enseñar a pensar, desarrollar el pensamiento crítico, despertar la actitud científica, pero las actividades docentes no se orientan en el mismo sentido, tanto en el tipo de "clases teóricas" como en los momentos de evaluación.

En la enseñanza predomina la transmisión de conocimientos y la repetición de los mismos durante los exámenes, en los que invariablemente se solicita medidas, cantidades, longitudes que obligan al alumno a memorizar para responder correctamente, al punto que algunos se aprenden las preguntas de examen para organizar su estudio.

Otra situación contradictoria es aquella en que el alumno no tuvo posibilidad de trabajar los temas del programa desde una reflexión y en la prueba de evaluación, oral o escrita, se le plantean situaciones problemáticas. Ocurre frecuentemente que un alumno que desee presentarse para la obtención de una beca de iniciación a la investigación, lo primero que hace es buscar un director, quien, ante la premura e inminente cierre de inscripción, le propone el tema y le facilita un modelo de diseño. Con base en este diagnóstico, pensamos que es posible promover la actitud
científica, formando al estudiante desde su ingreso a la universidad. No es suficiente, informar simplemente o transmitir conocimiento que hacen de la educación un adiestramiento, aunque es lícito elegir cuando diseñamos un plan o un curriculum, si queremos educar técnicos, profesionales o si formar personas con actitud científica; lo que no debemos hacer es manifestar contradicciones.

La ciencia exige creatividad, imaginación, pensamiento crítico y le hace mucho daño la prescripción de recetas o modelos fuertemente estructurados que impiden su desarrollo, pero insisto particularmente en la necesidad de no ser contradictorios: si proponemos la investigación como un eje de la educación, debemos ser congruentes en el proceso educativo para desarrollar el espíritu crítico, promover espacios de pensamiento, favorecer la discusión y análisis de temas diversos, estimular la participación y el trabajo en equipo, desarrollar la creatividad, la imaginación, dejar al alumno crecer a partir de su propia construcción de la realidad. De otro modo solo habremos conseguido confundirlo mas de lo que la sociedad y los medios lograron demorando su autonomía y decisión de vivir en libertad.

A modo de corolario quiero compartir la evaluación de experiencias con los docentes de esta universidad con logros son sorprendentes. Fueron usadas estrategias didácticas como la lectura crítica, el cine debate, elaboración de propuestas de mejoramiento de la calidad educativa, de la calidad de vida, de funcionamiento institucional, del curriculum. Conducir una clase donde la libre opinión y la crítica sean estrategias rutinarias es muy difícil pero es también un gran desafío. Al finalizar el curso hemos obtenido una producción escrita original y variada que da cuenta de las cosas que preocupan a los estudiantes y de su capacidad para
imaginar, expresarse, escribir y gestionar.

La formación docente sistemática , sin lugar a dudas, constituye el aporte mas valioso que la universidad ha realizado para construir el pensamiento crítico. Sería interesante la publicación de los trabajos como retribución genuina en ambos sentidos.

NUEVAS CONSULTAS SOBRE COMPETENCIAS CIENTIFICAS
http://www.mineducacion.gov.co/1621/article-87456.html

jueves, 6 de marzo de 2008

¿la imaginacion tiene enemigos?

Pasto, marzó 7 de 2008


Profesor
HECTOR TREJO CHAMORRO
Docente Universidad Mariana
Cuidad

Apreciado profesor

Le escribo esta carta como una forma de encontrarme con la imaginación. Conversando con algunas compañeras, decíamos que la imaginación precede al conocimiento, a la ciencia y a la misma investigación pero no las suplanta. Sin embargo, y como es de conocimiento de todos, el gran salto lo hace el conocimiento y por eso abunda, esta en las bibliotecas, en la internet. Es tan variado, complejo, tan voluminoso que no alcanzamos a leer, a revisar y a comprender cuál es la verdad de este conocimiento, o cual es el conocimiento válido, el conocimiento científico.

La sociedad de la información y el conocimiento van de la mano. Nos hacen sentir pequeños, insignificantes porque cada día tenemos que saber más, tenemos que especilizarnos, tenemos que demostrar que sabemos, que tenemos conocimientos, que tenemos cultura; y en este afan viene al angustia, el stres, la desmotivación, etc.

Profesor Héctor, a mi me parece que dedicarnos a imaginar es dedicarnos a pensar. Esta en deuda nuestra genración de pensadores. Somos muy dependientes de otros. El pensar es una forma de hacer epistemología, de hacer ciencia, de construir conocimiento. La imaginación es la fuerza para el pensar, es la aliada de nuestra inteligencia, de nuestra razón.

Sin embargo, desde mis lecturas personales encuentro que la imaginación en esta sociedad tiene unos enemigos. Se los quiero enumerar para que usted nos ayude a vencerlos en el aula de clase. Usted puede ser nuestro motor hacia el pensamiento divergente, imaginativo y creativo en este campo de la epistemológía.

- Enemigo de la imaginación creadora es la timidez, la excesiva modestia. "Sapere aude", atrévete a saber, decía Kant. Atrévete a imaginar, habría que decir en la universidad. La universidad debe ser "laboratorio de la imaginación" y no lugar para dictar clases.

-El síntoma primario de la escasez de imaginación es el aburrimiento, enemigo público de nuestro tiempo. A los jóvenes nos aburre pensar, crear, producir, generar ideas. Los aparatos tecnologógico como el "ipod", lo unico que nos trae es ruido a nuestros oidos, a tal punto que estamos algunos quedando sordos, ausentes de todo. Además no queremos sino memorizar lo que tenemos que repetir a nuestros docentes, que nos hacen memorizar para poderles repetir. Es un cículo vicioso.

-La pereza mental resultado de falta de habilidades mentales que no desarrollamos, porque el pensar nos quita tiempo para el sentir sensaciones, emociones de la musica, del video, de la rumba, del goce... Solo pensamos para recordar a corto plazo, para "pasar" una evaluación, para quedar bien ante el profesor, para sacar una nota, pero no para proponer, para argumentar, para provocar y para contradecir verdades enseñadas; para salir de las falcias que nos alejan de la verdadera realidad. Llamese falacia a eso que vivimos en Colombia con lo de Chavez, Correa, Uribe, Farc,paramilitares etc. Como si colombia no fuera exuberante, maravillosa, creativa, bella tierra querida, himno de fe y alegría.

-La inercia mental, reflejada en la quietud, el estancamiento, en tomar un puesto en un pupitre y esperar a que pase el tiempo, al cambio de hora, de profesor, de materia. Qué jartera vivir esta forma de vida en la universidad.

- Y la ignorancia...sin comentarios. Usted nos dijo que el "costo de la educacíon es la ignorancia".

Profesor, estos enemigos y otros que existen en la realidad, hay que buscarnos en nosotros mismos, tenemos que combatirlos con imaginación creadora, con motivación, con espíritu positivo y con innovación. Esta búsqueda debe comenzar desde su espacio académico, desde la cátedra de la imaginación que debe ser un "LABORATORIO DE LA IMAGINACIÓN", desde la lúdica tal y como usted realizó el "concurso internacional del saber". Tambien desde la argumentación, habilidad que nos falta a todos los estudiantes de la universidad.

¿Sabe?, he comprendido desde sus clases que saber argumentar es saber ir en contra de las verdades establecidas por el ser humano. Argumentar no es exponer, recitar, decir de memoria un texto.

Finalmente, quisiera decir que la imaginación no es la sombra del conocimiento, cuando imaginamos le damos vía a la construcción del conocimiento, a la ciencia y a todo aquello que nos ayuda a ser mejores.

Como tarea quiero dejarle que observe un video que se encuentra al final de esta carta y me escriba sobre esta experiencia del "laboratorio de la imaginación. Que haga sus comentarios como usted nos dice que debemos comentar.

Profe, que tal si pensamos en desarrollar el proyecto "laboratorio de la imaginación" con base en lo que usted nos dejó respecto a los científicos y a las 10 dudas que el ser humano no ha podido resolver. Pero, profe, no trabajamos en el aula de clase sino que montamos el escenario en una de las plazoletas de la universidad. Creo que todos los estudiantes marianos desearían saber de nuestra capacidad de imaginación. ¿Le parece interesante mi propuesta?. ¿Será que es posible traer para después de semana santa unas descripciones por cada grupo, unas inciativas?. Este tiempo de descanso nos ha de servir para limpiar la mente...

Lo reflexiona en esta Samana de Vacaciones.

Recuerde que soy su admiradora y por eso me atreví a escribirle esta carta.

Hasta la vista, profe.

Con afecto,

Una estudiante que quiere desarrollar pensamiento epistémico.
Me reservo el nombre.

Pd. Este es el video

lunes, 25 de febrero de 2008

¿Qué debería contener la cátedra de la Imaginación?

Bienvenidos a la cátedra de la imaginación

Mi propuesta, opine....

Primer Taller de la imaginación

En esta primera oportunidad vamos a iniciar el Taller, que se llamará Taller de Imaginación. Un motivo me anima a ello, que es como un letrero de advertencia antes de trasponer el umbral del taller: "Se ruega dejar afuera la razón como si fuera un botín con mocos". Se propone la linda tarea de pensar lo impensado, o de crear lo que el hombre o mujer no ha creado. ¡USEMOS NUESTRA IMAGINACIÓN!.

TALLER DE LA IMAGIANACIÓNA A TRAVÉS DE PREGUNTAS

1. Elaboremos modelos de preguntas con una lógica semejante a éstas: ¿una bicicleta es un triciclo al que le falta una rueda? ¿Una serpiente es una lagartija sin patas? ¿una bicicleta es una motocicleta sin motor? ¿una falda es un vestido al que le falta la parte superior? ¿un ratón es un murciélago sin alas?

Escriba las suyas....

TALLER DE AL IMAGINACIÓN A TRAVÉS DE PALABRAS-PREGUNTAS

TITULO DE LA OBRA: Las piedras musicales

Se eligen dos palabras, por ejemplo piedra y música.

¿Qué pasaría si se intentaran unir estas dos palabras: piedra-música? ¿Qué relación se les puede buscar, aunque esta sea disparatada?

Por ejemplo: Existió una casa hecha con piedras musicales. Si golpeabas con un palo una pared sonaba una trompeta.... Incluso: Era un pueblo musical, cada casa tenía el sonido de un instrumento. La casa de la Guardia Civil sonaba a tambor... Dentro de la casa de la Guardia Civil podría haber un preso: Había en los calabozos un preso que cantaba una triste canción que se escuchaba por todo el valle. Un dia dejó de cantar....

¿Qué había ocurrido?
¿Quien era ese preso?
¿De dónde venía?
¿Cómo terminaría la historia?.

Escriba, es decir, imagine....

jueves, 21 de febrero de 2008

¿Por qué la imaginación es más importante que el conocimiento?

San Juan de Pasto, febrero 21 de 2008


Jovenes Estudiantes
Universidad Mariana
La ciudad


Ref: La catedra de imaginanción


Saludo de Paz y Bien.

Les escribo esta carta, primero para saludarlos con el mejor de los aprecios y afectos que les tengo. Quiero decirles que los llevo en mi memoria y en este escrito quiero volverlos memorables. En segundo lugar, para comunicarles que desde hoy 21 de febrero, he decido crear desde el espacio académico de EPISTEMOLOGIA, la Cátedra de la Imaginación.

Ustedes me diran: -¿Y cuáles son las razónes profesor? ¿qué necesidad tiene si ya existe un espacio académico donde puede trabajar este "tema", "contenido"? ¿por qué una cátedra con ese nombre? ¿acaso los estudiantes no tenemos imaginación?. La verdad, jóvenes no tengo una respuesta sino una gran máxima de orientación que aprendí de uno de mis profesores de filosofía que recuerdo mucho. -El decía: "Sin imaginación el hombre no podría soportar la vida". Y les cuento que esto, lo estoy viviendo en carne propia. ¿Qué es eso que estoy viviendo en carne propia?

Les manifiesto que ya no puedo soportar la vida por la ausencia de imaginación y ya no soporto entrar al aula por por esta misma causa. ¡Qué causa profesor! - dirán ustedes? ¿Qué tenemos los estudiantes? ¿Qué está pensando de nosotros profesor?

No, la verdad no estoy pensando nada de mis estudiantes sino de mí mismo. Reitero de mí mismo. Quería decir que esta ausencia es mi propio olvido,de mi propia levedad, mi propia condición humana, de mi propia imaginación. En mis lecturas personales me encontré con Carl Sagan y con Einstein, mis favoritos de la ciencia. De las entrañas de sus libros extraje estas dos frases: "La ciencia no fascinó nunca la imaginación de la multitud que quémo la biblioteca de Alejandría..." y "La imaginación es más importante que el conocimiento" De estas freses comprendí que en mi espacio académico llamado epistemología se da más prevalencia al conocimiento por razones de "programa analítico", pero falta en sumo grado incluir tambien el desarrollo de la imaginación. ¿Por que se preguntará cada uno cuando lea esta misiva?

En nuestras aulas universitarias simplemente falta la imaginación, en el sentido de que ésta, la "imaginación" es el grado supremo de la memoria, el propio fermento de nuestra vida, de nuestra sensibilidad, de nuestras emociones y afectos, la facultad que alimenta la combustión, la potencia que enciende nuestras invenciones. La imaginación y memoria son la misma leña de esa hoguera que calienta la ficción. Por ello, "mis amigos de la imaginación y la memoria" Einstein y Sagan son los epistemólogos de la imaginación y no los epistemólogos del conocimiento.

Volverán entonces a preguntase nuevamente: ¿las aulas son espacios de la imaginación y de la memoria? o ¿son espacios para la epistemología del conocimiento?.¿las aulas son espacios para eleborar conocimiento y transferido a una agenda?, ¿Copiar conocimiento de un libro y trasferido a un cuaderno?, ¿Fotocopiar conocimiento y proyectarlo en un power point?.

¿Qué será entonces pensar en la Cátedra de la Imaginación?

Dice la historia que los Tolomeos no se limitaron a recoger el conocimiento conocido, sino que animaron y financiaron la imaginación y la investigación científica, y de este modo generaron nuevos conocimientos. Manifiesta Carl Sagan que los resultados fueron asombrosos: Eratóstenes calculó con precisión el tamaño de la Tierra, la cartografió, y afirmó que se podía llegar a la India navegando hacia el oeste desde España. Hiparco anticipó que las estrellas nacen, se desplazan lentamente en el transcurso de los siglos y al final perecen; fue el primero en catalogar las posiciones y magnitudes de las estrellas y en detectar estos cambios. Euclides creó un texto de geometría del cual los hombres aprendieron durante veintitrés siglos, una obra que ayudaría a despertar la imaginación y el interés de la ciencia en Kepler, Newton y Einstein. Galeno escribió obras básicas sobre el arte de curar y la anatomía que dominaron la medicina hasta el Renacimiento. Hubo también, muchos más epistemólogos de la imaginación y la investigación científica.

¿Cómo lo hicieron en esos tiempos sin tanto conocimiento?. ¿hoy como lo hariamos teniendo tanto conocimiento, tanta ciencia y con bibliteca heredada de la imaginación y consignada en el libro del concimiento, con la tecnología que el hombre ha desarrollado? ¿Por que no heredamos de esta generación esas palabras que a diario se escuhan: "el interes", "el gusto por el saber","la motivación", "el asombro", "la admiración", "la imaginación", "la creatividad", "la satisfacción" entre otras?.

Me pregunto, ¿qué le pasó a nuestra generación?, ¿donde están los Tolomeos de la imaginación? ¿donde están los jóvenes Sagan y los Einstein? ¿quién los formó y quién los está formando?. ¿dónde esta la memoria y lo memorable de esta generación? ¿donde se fue la imaginación? ¿quien es hoy el maestro?

Florece una legión de demonios en los pasillos y las aulas universitarias cautivando a los incautos con frases como estas que a diario se repiten: "que pereza", "que sueño", "que cansado estoy", "que jartera", "que mamera", "no, no, no", "que pesado", uff, uff, "por fin", "ya profe", "no más", "acabe" "que hay que hacer" etc., etc.

Aquí sentado en esta computadora, siendo las 12, 30 minutos, finalizo con la escritura de esta carta producto de mi imaginación y olvido. Pero dejo esculpidas estas palabras de la memoria, recordado la triste historia de la biblioteca de Alejandría cuando la gran muchedumbre se lanzó a incendiarla. "No hubo contrapeso al estancamiento, al pesimismo, a la entrega más abyecta al misticismo. Cuando al final de todo, la chusma se presentó para quemar la Biblioteca no había nadie capaz de detenerla...nadie que tuviera imaginación".pp. 333-5)Carl Sagan: la Biblioteca de Alejandría e Hipatia en Cosmos

Carl Sagan en el libro "el mundo y sus demonios" hace una dedicatoria que dice: "A Tonio, mi nieto, Te deseo un mundo libre de demonios y lleno de luz".

Jóvenes, nunca olviden que "la imaginación es mas importante que el conocimiento y que lo "lo más costos de la educación es la ignorancia" Rodolfo Llinas.

Por eso la idea de fundar la cátedra de la imaginación.


Su profe,

Héctor Trejo Chamorro.