jueves, 10 de abril de 2008

¿Qué es la actitud científica?



El siguiente texto es un aporte de la doctora María Olimpia Lockett.

El usuario que desee leer a esta escritora de textos científicos y busque ampliar más su contenido puede consultar en http://eluniversitario.unne.edu.ar/2005/61/pagina/enfoques.htm.

Se han extractado algunas ideas del texto titulado "La actitud científica en la enseñanza universitaria" . El propósito tiene fines didácticos y formativos, en tanto las nuevas preguntas de trabajo en el espacio de Epistemología General, apunta a formar en el educando el pensamiento epistémico y el espíritu científico. Me interesa que este "ferviente anhelo de indagación y búsqueda" lo desarrolle el estudiante que se inicia en el camino de la investigación formativa. Comencemos por entender la siguiente pregunta:

¿QUE ES LA ACTITUD CIENTÍFICA?.

El ser humano tiene distintas maneras de posicionarse frente a las cosas, los hechos, sucesos, fenómenos de la vida cotidiana: observarlos y describirlos, identificarlos y estudiarlos, aceptarlos o rechazarlos, intentar modificarlos, pensar que no le competen o asumir una actitud indagadora.

Cada una de estas actitudes dan cuenta de una manera de ser,de situarse frente al mundo y obedecen a modos distintos de pensar, a lógicas diferentes. Por un lado están los que no buscan explicación a los hechos, ven la realidad como algo determinado, establecido desde siempre y para siempre (toda la vida fue así). Otros en cambio, asumen una actitud crítica, curiosa, abierta, innovadora, creativa y buscan permanentemente el "por qué", una explicación a lo establecido, que no los conforma, intentando modificar la realidad para mejorar la situación.

Los primerosson dogmáticos en tanto que los segundos son críticos. Julián Marías tipifica al hombre en tres categorías:

1)Los que viven fuera de los problemas teóricos. Para ellos la vida no se presenta como un sistema de problemas intelectuales que se formulen racionalmente y a los cuales se responda con un a teoría(el campesino, el pragmático).

2) Los que conocen la existencia de estos problemas teóricos pero le resultan
ajenos, como algo que no existe allí en el mundo circundante
, tal vez para otros, pero no forman parte de su vida. Estos hombres se desenvuelven en el ámbito de la cultura intelectual pero solo quieren informarse(el técnico, el profesional dogmático, el gobernante).

3) Los que se plantean estos problemas teóricos y quieren tener una construcción racional del mundo coherente con una filosofía, una ideología, un paradigma, una
doctrina
: son los filósofos, los científicos, los investigadores, los teólogos.

A fin de reflexionar sobre los distintos perfiles humanos veamos las connotaciones que para cada caso aparecen como características individuales o sociales e inciden en los procesos institucionales. Si bien lo que expongo es producto de la observación cotidiana, queda abierta la posibilidad de intentar un estudio científico, aunque pienso que se trata mas bien de argumentar y dejar abierto el debate.

Comenzaré analizando que significa crítica. Comúnmente al que critica se lo llama despectivamente criticón, quisquilloso. Los sinónimos encontrados para la palabra crítica son: sátira, diatriba, censura, murmuración, detracción, desaprobación y muchas veces se confunde con chisme, cuento, embuste, invención, fabulación.

También significa: análisis, opinión,juicio de valor, evaluación. Los primeros atributos no exigen explicación alguna, simplemente se expresan, en tanto que los segundos son argumentados con exposiciones basadas en teorías diversas provenientes de la lógica, la filosofía, la sociología, la antropología, la psicología.

Ezequiel Ander Egg habla de la actitud crítica que deviene en actitud científica contrapuesta al dogmatismo, a las creencias, a lo que se tiene por establecido; la actitud científica prepara el camino para entrar al mundo de la ciencia por que nos permite discernir, analizar que es lo mas conveniente, para mí y para los demás. Si mi juicio es equivocado acepto la crítica pero intento argumentar para mantener mi opinión hasta que otro argumento, mas convincente, logre demostrarme lo contrario ... y así sucesivamente. No se trata de ganar o perder si no de discutir, analizar, pensar para proceder en consecuencia.

La actitud crítica es indispensable para iniciarse en la investigación y producir
conocimiento científico; esta es la manera en que avanza la ciencia toda vez que los descubrimientos son publicados y sometidos a la crítica. De esta surge una refutación o inspira el estudio de aspectos no considerados.

El conocimiento científico como resultado de las actividades de la Ciencia, aparece como un dato: un número, un porcentaje, un signo, que puede simplemente describirse para ser comunicado o bien buscar significados que permitan interpretar el dato, darle sentido por medio del lenguaje. Para hacerlos creíbles, recurrimos a las teorías generales.

La discusión acerca del carácter científico de la explicación constituye un capítulo aparte, objeto de la epistemología, por lo que no analizaremos aquí. Algunos fenómenos o hechos de la realidad, pueden explicarse empíricamente; otros en cambio,no pueden ser sometidos a un diseño experimental por lo que deben justificarse con los argumentos identificados en las teorías provenientes de la física, la química, la matemática, la lógica.

Cualquiera de los grandes acontecimiento científicos de la historia da cuenta de situaciones como la que vivió Galileo queriendo explicar sus observaciones, puesto que no las podía probar, con argumentaciones teóricas intenta demostrar la valides de sus hallazgos para convencer a los representantes mas conspicuos de la iglesia y de la vida pública , dado que rompía con las creencias del geocentrismo, obstinación que le costó la prisión y la muerte en la hoguera de su seguidor Giordano Bruno.

De igual manera, los hechos humanos que no admiten experimentación deben ser interpretados y explicados teóricamente desde la sociología, la antropología, la
psicología. Hay rasgos que caracterizan a los sujetos que asumen una actitud científica; una de ellas es la capacidad para reconocer las limitaciones y diferenciar la etapa de imprimación, en la que el sujeto no puede establecer relaciones entre los elementos percibidos o representados, de aquella en que puede reconocer que lo registrado por los sentidos no es la realidad sino una fracción o momento.

Esta conciencia abre en el sujeto la posibilidad de darse cuenta que la capacidad de abstracción puede coordinar distintas percepciones e incluso encontrar que entre ellas hay contradicción. Esto último hace a una disposición a lo conceptual, esto es que el sujeto sea sensible a las contradicciones y trate de resolverlas construyendo explicaciones utilizando datos pertinentes y comprobables. Ahora bien, esta disposición a utilizar el nivel de abstracción (la formación de conceptos) para coordinar o dirimir contradicciones entre las percepciones supone la posibilidad del placer mediato. Con frecuencia el sujeto de la vida cotidiana se maneja con la obtención de placeres inmediatistas mientras que, el sujeto de la actitud científica es el que, en alguna medida, puede postergar esos placeres en aras de algún mayor placer pero mediato.

Otra característica de los sujetos que adoptan una actitud científica, es la curiosidad, la observación constante para descubrir lo que subyace en cada situación, lo que induce al individuo a buscar nuevas pautas o modelos, haciendo de ello su objeto de estudio. No creo en logros inmediatos sino al cabo de un largo proceso, sin interrupciones, en el que claramente se evidencien actitudes cotidianas como un modo de vida, una manera de educar en la que el estudiante tenga la oportunidad de reconocer estados conflictivos, darse cuenta que pueden existir situaciones inesperadas y decidirse a enfrentarlas, lo que marcará una evolución en el desarrollo de la personalidad, del conocimiento y de la formación integral.

Los conceptos serán asimilados, aprehendidos, en tanto resulte significativo para el sujeto al punto de encontrar las condiciones que le permitan formular sus propias hipótesis, manifestar libremente sus ideas y descubrimientos. Es en este momento donde el sujeto encuentra su identidad, comienza a interesarse por temas que
cotidianamente no le interesaban y a comprometerse con ideas nuevas siempre que las cuestiones resulten de su interés o le permitan resolver conflictos personales o comunes de su vida de relación.

En nuestra experiencia hemos podido advertir que cuando el alumno logra aprendizajes
significativos, se compromete con el tratamiento de los temas propuestos y realiza trabajos escritos altamente satisfactorios que no se agotan en un requisito formal para la graduación sino que sirve de estímulo para buscar nuevos espacios, nuevas perspectivas.

La pregunta obligada es ¿como despertar la actitud científica?. Hay algo importante que considerar en este punto: la necesidad que exista una congruencia entre lo que se propone y lo que se practica. La mayoría de las carreras universitarias expresan en los propósitos u objetivos del curriculum: enseñar a pensar, desarrollar el pensamiento crítico, despertar la actitud científica, pero las actividades docentes no se orientan en el mismo sentido, tanto en el tipo de "clases teóricas" como en los momentos de evaluación.

En la enseñanza predomina la transmisión de conocimientos y la repetición de los mismos durante los exámenes, en los que invariablemente se solicita medidas, cantidades, longitudes que obligan al alumno a memorizar para responder correctamente, al punto que algunos se aprenden las preguntas de examen para organizar su estudio.

Otra situación contradictoria es aquella en que el alumno no tuvo posibilidad de trabajar los temas del programa desde una reflexión y en la prueba de evaluación, oral o escrita, se le plantean situaciones problemáticas. Ocurre frecuentemente que un alumno que desee presentarse para la obtención de una beca de iniciación a la investigación, lo primero que hace es buscar un director, quien, ante la premura e inminente cierre de inscripción, le propone el tema y le facilita un modelo de diseño. Con base en este diagnóstico, pensamos que es posible promover la actitud
científica, formando al estudiante desde su ingreso a la universidad. No es suficiente, informar simplemente o transmitir conocimiento que hacen de la educación un adiestramiento, aunque es lícito elegir cuando diseñamos un plan o un curriculum, si queremos educar técnicos, profesionales o si formar personas con actitud científica; lo que no debemos hacer es manifestar contradicciones.

La ciencia exige creatividad, imaginación, pensamiento crítico y le hace mucho daño la prescripción de recetas o modelos fuertemente estructurados que impiden su desarrollo, pero insisto particularmente en la necesidad de no ser contradictorios: si proponemos la investigación como un eje de la educación, debemos ser congruentes en el proceso educativo para desarrollar el espíritu crítico, promover espacios de pensamiento, favorecer la discusión y análisis de temas diversos, estimular la participación y el trabajo en equipo, desarrollar la creatividad, la imaginación, dejar al alumno crecer a partir de su propia construcción de la realidad. De otro modo solo habremos conseguido confundirlo mas de lo que la sociedad y los medios lograron demorando su autonomía y decisión de vivir en libertad.

A modo de corolario quiero compartir la evaluación de experiencias con los docentes de esta universidad con logros son sorprendentes. Fueron usadas estrategias didácticas como la lectura crítica, el cine debate, elaboración de propuestas de mejoramiento de la calidad educativa, de la calidad de vida, de funcionamiento institucional, del curriculum. Conducir una clase donde la libre opinión y la crítica sean estrategias rutinarias es muy difícil pero es también un gran desafío. Al finalizar el curso hemos obtenido una producción escrita original y variada que da cuenta de las cosas que preocupan a los estudiantes y de su capacidad para
imaginar, expresarse, escribir y gestionar.

La formación docente sistemática , sin lugar a dudas, constituye el aporte mas valioso que la universidad ha realizado para construir el pensamiento crítico. Sería interesante la publicación de los trabajos como retribución genuina en ambos sentidos.

NUEVAS CONSULTAS SOBRE COMPETENCIAS CIENTIFICAS
http://www.mineducacion.gov.co/1621/article-87456.html